1. Empieza poco a poco
Si estas acostumbrada a usar tonos neutrales, la idea de agregar color puede sonar aterradora. Empieza poco a poco eligiendo colores no tan dramáticos ni intensos. Si en tu gurdarropa predomina el negro, agrega azul marino, café obscuro, verde olivo. Si predomina el beige, agrega amarillo pálido, palo de rosa, melocotón u otros tonos delicados.
2. Agrega color en tus accesorios
Usar accesorios es la mejor opción para no sentirte fuera de lo común a la hora de agregar color a tu look. Elige un color que contraste con tu outfit, puedes hacer un look completamente negro o de color neutro y agregar un bolso rojo, o un par de aretes de color, unos zapatos, hasta una bufanda de algun color sobresaliente. ¡Recuerda que el color de tus uñas también cuenta!
3. Agrega un pop of color
Para balancear tu look, lo primero que debes de hacer es elegir qué prenda va a ser el enfoque del color, puede ser una blusa, un blazer, o una falda. Ya que determines cual es esa prenda, entonces podrás combinar el outfit con colores neutros o báscios, para que la prenda resalte más.
4. Opta por un look monocromático
Una de mis maneras favoritas de agregar color es elegir solo un tono y usarlo en todo mi outfit. Es la forma más fácil de obtener un look sofisticado y que además está en tendencia. Busca una blusa de un color brillante y combinalo con un par de pantalones o falda del mismo tono o un tono similar. ¡Puedes combinar tus zapatos y todos tus accesorios del mismo tono para obtener puntos de color extras!
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